Quiénes Somos
Sueño, visión y corazón
En La Sinagoga Posada Real, todo comenzó con un sueño, una visión de crear un espacio que combinara la rica historia de Peñaranda de Duero con un ambiente acogedor y moderno. Desde nuestros inicios, hemos puesto el corazón y el alma en cada rincón de nuestra posada, con el objetivo de ofrecer a nuestros huéspedes una experiencia única, llena de confort, calidez y atención al detalle.
Nuestra historia:
un sueño hecho realidad
El proyecto de La Sinagoga Posada Real tiene sus raíces en 1992, cuando nuestra fundadora, Mamen Vélez, decidió emprender un camino lleno de retos y oportunidades. En plena crisis económica, y con el apoyo incondicional de su familia, Mamen se embarcó en la creación del primer hotel en la villa de Peñaranda de Duero. Lo que comenzó como un modesto proyecto se transformó en un éxito gracias a la dedicación y la pasión de quienes creyeron en este sueño.
A lo largo de los años, la posada ha evolucionado y crecido, manteniendo siempre la esencia de sus orígenes. En 2006, abrimos dos nuevos alojamientos, y en 2020, después de más de tres décadas dedicadas a perfeccionar este sueño, vio la luz La Sinagoga Posada Real, una nueva etapa en nuestra historia. Este nuevo proyecto representa la culminación de años de trabajo y dedicación, ofreciendo un lugar donde nuestros huéspedes pueden disfrutar de una estancia en un edificio histórico con todas las comodidades modernas.
Nuestra filosofía:
más que un simple alojamiento
En La Sinagoga Posada Real, creemos que la hospitalidad es mucho más que ofrecer un lugar donde dormir. Nuestra filosofía se basa en el cuidado del entorno, el bienestar de nuestros huéspedes y la creación de experiencias que perduren en el tiempo.
Uno de nuestros principios fundamentales es el respeto por el medio ambiente. Hemos integrado energías limpias en nuestra posada, como la energía solar y eólica, y utilizamos sistemas de climatización por suelo radiante que permiten un ahorro energético significativo. Creemos firmemente en la importancia de preservar el entorno natural que nos rodea, y nos esforzamos por minimizar nuestro impacto ambiental en cada una de nuestras actividades.
Pero lo más importante para nosotros es el trato personalizado que ofrecemos a cada uno de nuestros huéspedes. Nos enorgullecemos de crear un ambiente familiar y cercano, donde cada persona que se aloja con nosotros se siente como en casa. Desde el momento en que llegas a La Sinagoga Posada Real, nuestro equipo está a tu disposición para asegurarse de que tengas una experiencia única, adaptada a tus necesidades y deseos.
Conoce a nuestra gerente: Mamen Vélez
Mamen Vélez, la fundadora y gerente de La Sinagoga Posada Real, es una mujer apasionada por la hospitalidad y el contacto con la naturaleza. A lo largo de los años, Mamen ha perfeccionado su visión de lo que significa ofrecer una experiencia inolvidable a los huéspedes. Como ella misma dice, “puede ser la edad, la experiencia, los éxitos, los fracasos, el dolor o las alegrías, pero ahora sé exactamente dónde quiero ir y con quién quiero compartir este viaje”.
En su tiempo libre, Mamen disfruta de la naturaleza que rodea Peñaranda de Duero, paseando por los bosques de La Pinosa, un lugar lleno de encanto donde robles y encinas se alzan imponentes. A través de estos paseos, ha aprendido a valorar los pequeños detalles que hacen que cada estancia en La Sinagoga Posada Real sea tan especial: el calor de la chimenea en invierno, la frescura del aire entre los árboles, y la compañía de seres queridos.
Mamen y su equipo trabajan incansablemente para asegurarse de que cada huésped viva una experiencia inolvidable en La Sinagoga Posada Real. Ya sea a través de la atención al detalle en cada habitación, la organización de actividades al aire libre o la personalización de eventos especiales, su misión es hacer que cada estancia sea única y memorable.
Nuestro compromiso contigo
Cuando te alojas en La Sinagoga Posada Real, no solo estás disfrutando de una estancia en un lugar histórico, sino que también formas parte de nuestra familia. Nos enorgullecemos de ofrecer un servicio cercano y auténtico, donde cada detalle cuenta y cada huésped es importante. Creemos que el verdadero lujo no está en las grandes comodidades, sino en los pequeños gestos que hacen que te sientas especial.
En La Sinagoga Posada Real, somos un equipo familiar que trabaja con pasión y dedicación para ofrecerte una experiencia única y cercana. Cada uno de nosotros está formado y concienciado sobre el entorno histórico en el que nos encontramos, así como sobre los valores que nos definen: hospitalidad, respeto por el medio ambiente y trato personalizado.
Desde nuestros inicios, nuestra meta ha sido que cada huésped se sienta como en casa. Somos un equipo comprometido con la calidad y el bienestar de nuestros visitantes, y nos aseguramos de que cada estancia sea especial, adaptándonos a las necesidades de quienes nos eligen. La cercanía, la calidez y el esfuerzo por ofrecer un servicio excepcional son los pilares que guían nuestra labor.
Trabajamos con el corazón, porque creemos que cada detalle cuenta. La esencia de nuestra posada reside en la armonía entre el confort moderno y el respeto por la historia que nos rodea. Como equipo, compartimos la misma visión: hacer de cada visita un recuerdo inolvidable.